viernes, 27 de marzo de 2015

''UN POCO PERDIDO''

‘’Nunca valoramos el verdadero estado de nuestra situación hasta que la contraria nos lo muestra, ni sabemos apreciar lo que tenemos hasta que lo perdemos. ’’
ROBINSON CRUSOE, Daniel Defoe 

Así termina el libro de Chris Haughton y así comienzo yo. Con esta frase de Daniel Defoe se recoge lo que el autor nos pretende mostrar con su libro. No apreciamos lo que tenemos hasta que lo perdemos.

El autor escribe este libro por que como él dice, << De niño me encantaban los libros con ilustraciones que contuvieran elementos que podías descubrir en lecturas sucesivas>> y esto lo plasmó en su primera obra, ‘’Un poco perdido’’. En una entrevista cuenta, que cuando escribió el libro lo presentó a treinta editoriales, no a cien como se rumorea. Pero confirma que fue un editor coreano (Borim Press) quien se interesó en su obra y a partir de ahí todo comenzó a ir sobre ruedas.

El libro tuvo una gran acogida. A día de hoy ya ha sido traducido a más de 15 idiomas y su autor ha recibido una larga lista de premios y menciones en diferentes países gracias a él. Existe una edición en tamaño álbum la cual pienso que es indispensable para que este en el aula y una edición en tamaño pequeño.

Simplemente por su sencillez me llamó la atención, por eso lo escogí. Un poco perdido no se queda únicamente en la historia de un pequeño búho que al caer del nido pierde a su mamá, si no que va más allá tratando la sorpresa, la tristeza, la ayuda, la alegría… no solo los niños pueden sentirse identificados con la historia, los adultos también ya que en ocasiones nos hemos encontrado perdidos, desorientados, con la sensación de no saber a quién estamos pidiendo ayuda.  


BIBLIOGRAFÍA

         - Título: Un poco perdido (A bit lost)
         - Autor: Chris Haughton
         - Ilustrador: Chris Haughton
         - Editorial: Milrazones
         - Año de edición: Noviembre 2003
         - Idioma original: Coreano
         - Edad recomendada: 3-4 años


FORMATO

El libro ‘’Un poco perdido’’ tiene una buena manejabilidad para niños de entre la edad escogida (3-4 años) ya que no mide más de 27 cm de largo ni de ancho, es cuadrado y no muy grande. El material del que está hecho el libro es cartoné. Material perfecto para que pueda ser manoseado por los niños una y otra vez.

Según mi opinión no tiene una portada atractiva que pueda ser llamativa para los niños. No es del típico color que a un niño de tres/cuatro años le llamaría la atención, ya que emplea colores un poco sobrios. Con las ilustraciones no ocurre esto, ya que son más atractivas, debido a que el autor quiere dar una imagen de estos animales distinta de la normal. Para las páginas en las que se muestra el paisaje utilizada colores oscuros, otras aparecen completamente en blanco para destacar el texto y los personajes. Así se consigue que los niños reconozcan a los personajes, entre ellos Pequeño Búho, con quien queremos conseguir que se identifiquen.

En la edad elegida se comienza a dar la introducción a la lectura y escritura, empleando para ello siempre un tipo de letra redonda. La que el autor emplea en ‘’Un poco perdido’’ a pesar de no estar separada, es pequeña y cuadrada por lo que para los niños seria complicada leerla con claridad. Considero  entonces que no es recomendable para esta edad.

TEMAS

En este libro encuentro diferentes temas. Todo comienza cuando Pequeño Búho pega una cabezada en su nido, cayéndose hacia un lado y separándose así  del lado de su madre. Comienza entonces una búsqueda por todo el bosque, el cual no conoce tanto como él pensaba. Contará con la ayuda de Ardilla, un poco despistada y de una rana, quienes le ayudaran a encontrar a su madre.

El tema del amor por los padres y la necesidad de los más pequeños por  encontrarlos y reunirse con ellos es muy importante. El vinculo que un niño tiene creado con sus padres y el miedo que llegan a sentir en su interior cuando se da una separación de ellos es muy grande, debido a la sensación que nace al encontrarse solo por un momento en un lugar que en cuestión de poco tiempo se te hace cada vez más grande.

Detrás de todo esto se deja entrever aquello que va siempre en relación con esta situación, como la tristeza y la incertidumbre cuando se dan las separaciones y la alegría cuando se dan los reencuentros. Y aquello que hacen y dicen para conseguir encontrarlos, siendo por ello una historia con la que los niños se van a sentir relacionados con facilidad.

Cuando un niño se pierde comienza a dar una serie de características de sus padres de la forma en que ellos les ven. Lo mismo va haciendo Pequeño Búho con Ardilla, haciendo que esta le presente una serie de animales y descubrirán así en que se parecen unos animales a otros y porque a pesar de ello un oso no es lo mismo que un búho.




El autor pretende también presentar en esta sencilla historia las características de los diferentes animales que el bosque esconde, para que de esta forma Pequeño Búho conozca las características de su madre. Como bien digo, esto es una pretensión por parte del autor, ya que no yo en el aula no emplearía el libro para trabajar este tema.
Es una historia de lo más sencilla que aunque a simple vista se ve como una situación triste, se va convirtiendo en una bien cómica, debido a las despistadas ideas de la atolondrada Ardilla que ayuda a nuestro Pequeño Búho.

               
ESTRUCTURA

La estructura de la obra es lineal. Tiene un planteamiento donde Pequeño Búho se cae de su nido y en pocos momentos es encontrado por Ardilla, quien le ayudara. Juntos van dando lugar al desarrollo del nudo de la obra donde Ardilla le va presentando a Pequeño Búho diferentes animales para ver cuál de ellos es su mama, hasta que con la ayuda de la rana consiguen encontrarla. Concluye con un desenlace donde madre e hijo se reencuentran y agradecen a Ardilla y a la rana haberles juntado de nuevo inventándoles a comer galletas en su nido. El final es abierto, de nuevo Pequeño Búho pega una cabezada desde el nido y dice esas dos palabras con las que comienza todo… - ¡Uy, uy!- dejando así que el niño imagine lo que deseé.




PROTAGONISTAS

El protagonista se trata de un animal, como bien sabemos un búho. Se comporta como lo que es, un Pequeño Búho que se encuentra perdido en un lugar que apenas conoce y con un sentimiento de incertidumbre ya que ha desaparecido del lado de su madre. Podríamos relacionarlo con la misma edad a la que queremos dirigir esta lectura (3-4 años).
El lenguaje que utiliza Pequeño Búho es muy sencillo, claro y adecuado para esta edad. Emplea frases cortas, fáciles de entender que a su vez transmiten mucho. El autor consigue que al leerlas sintamos una sensación muy dulce como si un niño pequeño fuese el que nos lo está diciendo.

Con el comportamiento ocurre lo mismo, refleja claramente el comportamiento de un niño cuando se pierde en algún lugar y necesita saber donde están sus padres. En las ilustraciones se le ve con ojos tristes y con el ala en el pico constantemente dando sensación de no saber nada. Su forma de pensar se puede ver cuando comienza a describir rasgos físicos de su madre según como la ve él. Tanto el comportamiento como la forma de hablar y pensar se pueden relacionar con la que emplearía un niño, por lo que se van a sentir totalmente identificados con Pequeño Búho.

En cuanto al resto de personajes, el único que podría representar un rol conocido para el niño receptor sería la madre, es claramente reconocible. En el caso de Ardilla y de la rana pueden ser reconocidas por el niño en el sentido animal, no por asignarles un rol con quien ellos lo identifiquen, ya que tienen un papel ‘’pasajero’’ por llamarlo de algún modo. Aparecen en un momento determinado para ayudar a Pequeño Búho a encontrar a su mamá, por lo que los niños no podrían relacionarlo con alguien cercano a ellos.


VALORES Y CONTRAVALORES

Uno de los valores principales de la obra es claramente el cariño y la necesidad. El cariño que Pequeño Búho siente por su madre, es con el toda persona que lea el libro se va a sentir identificado.  La necesidad, esa necesidad de volver a encontrarse con ella. Por otro lado se puede ver el cariño de una madre hacia un hijo. Aunque no sea el tema principal en el libro hay una ocasión en que se hace mención a que Mamá Búho anda como loca buscando a Pequeño Búho por todo el bosque.

La valentía por parte de Pequeño Búho a la hora de salir a buscar a su madre a pesar de su corta edad contando con la ayuda de Ardilla. La generosidad de Ardilla que al ver a Pequeño Búho solo no dudo ni un momento en ayudarle de la forma en que puede, al igual que la rana la cual también demuestra generosidad con el pequeño. También se puede ver este valor por parte de Mama Búho cuando por fin consigue reunirse con su hijo e invita a Ardilla y a la rana a tomar galletas en su nido en señal de agradecimiento, valor que también podemos comprobar.


LENGUAJE

‘’Un poco perdido’’ pienso que es un libro que nos puede dar un poco de todo. Puede tener un estilo tierno que tener un estilo humorístico. Al leerlo hay ocasiones en las que Pequeño Búho transmite mucho con sus palabras de preocupación, pero la aparición de la ardilla llena de toques humorísticos la obra debido a sus atolondradas ideas.
Podemos ver figuras literarias como la adjetivación que se usa cuando habla Pequeño Búho describiendo a su mamá. Podemos encontrar también en estos diálogos repeticiones, tanto cuando habla Pequeño Búho como cuando lo hace Ardilla.

En general gran parte del dialogo que aparece en la obra entre Pequeño Búho y Ardilla es una repetición constante.
Las onomatopeyas también están presentes. Además tienen gran importancia ya que con ellas empieza la obra y con ellas finaliza dando lugar a un final abierto.

Aunque los receptores sean niños, no se debe dejar de usar este tipo de figuras retoricas. Es más, hay ocasiones en las que viene mejor que se dé un uso de ellas, ya que hacen la lectura y su entendimiento mucho más fácil.
Esto ocurre por ejemplo con las onomatopeyas, ya que se refiere a los sonidos de palabras cuya pronunciación hace el sonido que representan y esto dota de gran realismo la obra al a hora de contarlo.

 Mi mama tiene los OJOS GRANDES. ¡ASÍ!


             Mi mamá tiene las orejas PUNTIAGUDAS ¡ASI!
            Mi mamá tiene los OJOS GRANDES ¡ASÍ!

                                                                       ¡Uy... uy...!
                                                             ¡Pim... Pam... PUM!





            


CONCLUSIÓN

Después de analizar este libro, la conclusión a la que he llegado, es que utilizaría este libro con los alumnos de 3-4 años ya que son a quienes más se ajustan las características del libro. Podría hablar con ellos sobre si en alguna ocasión han vivido una situación así, si han sentido lo que Pequeño Búho siento al separarse de su madre, dándole un carácter emocional y demostrando a los niños que deben apreciar aquello que tienen porque en algún momento pueden perderlo.  
Dejaría quizás un poco de lado, el tema de pretender enseñarle a los niños los animales con este libro ya que entonces la historia perdería el protagonismo y el encanto literario.
Como bien he dicho, la fuente quizás no es lo más adecuada para los niños de esta edad ya que les puede ser complicado entenderla. Pero si tiene muy buenas ilustraciones tanto del bosque como de los personajes, que se les podrían mostrar a los niños y debido a su sencillez ellos podrían imaginar en su cabeza el transcurso de la historia echando a valor su imaginación. Para ello contamos con la edición del libro en tamaño álbum y con el cuento digitalizado, lo cual nos puede venir estupendamente para mostrarlo en el aula.

                             https://www.youtube.com/watch?v=4vgNV6Srpqw

Una vez que he leído el libro y lo he trabajado, estoy segura de que podría ser uno de los libros que no faltara en mi biblioteca de aula.


Al buscar información sobre el autor del libro, Chris Haughton, he encontrado información en la que habla de sus demás libros (¡Oh no, Lucas! Y ¡Shhh! Tenemos un plan) los cuales van en la línea de ‘’Un poco perdido’’ y también han tenido gran éxito y de los proyectos solidarios que está llevando a cabo en Nepal. 


lunes, 16 de marzo de 2015